¿Los tratamientos inyectables de belleza facial podrían sustituir a las cirugías?

Mujer recibe un tratamiento facial inyectable

Actualmente existe una gran variedad de tratamientos cosméticos, entre ellos los tratamientos inyectables como los rellenos para el rostro y los skinboosters. ¿Cuán eficaces son estos tratamientos en comparación con las cirugías? ¿Es posible obtener los mismos resultados? ¿Cuáles son las ventajas y desventajas de cada alternativa?

Para averiguarlo, lo mejor es empezar por comprender qué sucede con el rostro a medida que envejecemos. El envejecimiento implica muchos procesos diferentes que tienen lugar en distintas partes del rostro. Cuanto mejor comprendas el proceso de envejecimiento, mejor podrás saber cuál es la opción óptima para ti y con cuál obtendrás el mejor resultado.

Si eres joven, es probable que aún no te parezca relevante conocer el proceso de envejecimiento, pero en realidad es igualmente importante que sepas cómo cambia el rostro con el tiempo y cómo puedes proteger el tuyo del envejecimiento. Un procedimiento que hoy te convenga quizá no sea el óptimo en el futuro. Particularmente en lo que respecta a las cirugías irreversibles, las consecuencias pueden ser importantes.

A continuación, podrás leer acerca de los cambios por los que pasa el rostro a medida que envejecemos y de los tratamientos más adecuados para los diferentes tipos de cambios. Estos conocimientos te permitirán maximizar tu potencial de belleza único y prevenir los signos de envejecimiento.

El artículo aborda los siguientes temas:

  • El proceso de envejecimiento y cómo altera nuestros rasgos faciales
  • Nuevas opciones de tratamiento con tecnologías novedosas
  • Uso del producto adecuado para cada indicación
  • Cómo personalizar y perfeccionar tu propia belleza

El proceso de envejecimiento en distintas partes del rostro

– Estructura ósea. El cuerpo remodela constantemente su estructura ósea. Cuando uno es joven, la formación de tejido óseo excede la reabsorción ósea (el proceso de descomposición del tejido de los huesos y la liberación de minerales, el cual provoca la transferencia de calcio del tejido óseo a la sangre). Sin embargo, a medida que uno envejece, la reabsorción ósea excede la formación de tejido óseo. Esto significa que el rostro pierde volumen y definición de manera gradual. La reabsorción ósea suele ser particularmente visible en las sienes y en la parte posterior de la mandíbula.

– Compartimentos de grasa. A medida que envejecemos, nuestro rostro pierde volumen debido a la pérdida de grasa facial. Además, los compartimentos de grasa de las mejillas descienden hacia la línea mandibular y contribuyen a que las mejillas tengan una apariencia flácida. A su vez, la línea mandibular comienza a descender y pierde definición. También perdemos volumen en los labios y, con el tiempo, más o menos en toda la cara.

– Hidratación. Uno de los principales factores que intervienen en la hidratación de la piel es el ácido hialurónico. El ácido hialurónico puede unirse a una masa de agua equivalente a mil veces su propio peso molecular. Sin embargo, a medida que envejecemos, nuestra piel se ve sometida a cambios que afectan su apariencia y pueden provocar que pierda su brillo natural.[1]

– Colágeno y elastina. El colágeno y la elastina son otros dos componentes importantes de la piel que contribuyen a darle estructura y elasticidad. Al envejecer, la piel produce menos colágeno y elastina, lo cual significa que tenemos menos fibras de colágeno y elastina en comparación con una persona más joven. El resultado es una piel más delgada y flácida que ha perdido elasticidad, estructura y flexibilidad.[2]

– Arrugas. A medida que envejecemos se forman arrugas, en parte debido a la pérdida de ácido hialurónico, colágeno y elastina, pero también debido a la repetitividad de las expresiones faciales.

Para el tratamiento de las arrugas, convencionalmente se ha recurrido al estiramiento facial, en el que la piel se extiende y el exceso de tejido se retira. Sin embargo, este procedimiento quirúrgico no sirve para tratar los diferentes cambios que tienen lugar a medida que envejecemos, como la reabsorción ósea, la pérdida de hidratación o la pérdida de grasa facial, por ejemplo. 

Las nuevas tecnologías han llegado muy lejos en cuanto al tratamiento de zonas específicas y problemas específicos de la piel envejecida del rostro. Estos adelantos han ocasionado que muchos cirujanos plásticos cambien las cirugías por tratamientos de mínima invasividad, como los tratamientos inyectables. Escucha al Dr. Steven Weiner, cirujano plástico de Florida, explicar por qué prefiere trabajar en mayor medida con tratamientos de mínima invasividad.

El Dr. Steven Weiner, cirujano plástico, explica por qué prefiere los tratamientos de mínima invasividad.

 

En palabras del Dr. Steven Weiner: “Hemos llegado a una época en la que podemos ir aliviando los signos del envejecimiento mediante tratamientos de mínima invasividad”. La única parte del rostro en la que podría necesitarse una intervención quirúrgica es alrededor de los ojos para, por ejemplo, retirar los abultamientos de piel de los párpados inferiores. No obstante, incluso estos abultamientos pueden volverse menos visibles con un relleno dérmico. 

La ventaja más importante de los tratamientos inyectables con respecto a la cirugía es que no son permanentes. Por consiguiente, uno puede ajustar y perfeccionar sus contornos faciales de acuerdo con las necesidades específicas que tenga a una cierta edad. En los últimos años hemos visto que personas más jóvenes han comenzado a solicitar procedimientos de corrección del mentón y de la línea mandibular. Es una gran ventaja que podamos ajustar continuamente el tratamiento, pues la mandíbula inevitablemente cambia con el paso del tiempo.

Utiliza el producto adecuado para cada parte del rostro

Para obtener el resultado óptimo con tu tratamiento, es importante que utilices el producto adecuado para cada parte del rostro. Las nuevas tecnologías han puesto a nuestra disposición una gran variedad de opciones diferentes. En esta nueva era de procedimientos estéticos faciales nos hemos apartado de los tratamientos convencionales. El objetivo ahora es mejorar y restaurar tu propia belleza natural para que puedas lucir lo mejor posible. 

A continuación, presentamos un breve resumen sobre qué productos utilizar, dónde y por qué. Tu especialista podrá darte más información acerca de los diferentes tratamientos. Te invitamos también a que veas el siguiente video en el que el dermatólogo sueco Christoph Martschin explica cómo se desarrolla el proceso de envejecimiento en distintas partes del rostro y cómo tratarlo.

 

– Restaurar y mejorar la estructura ósea. Los rellenos dérmicos hechos a base de ácido hialurónico pueden utilizarse para compensar la reabsorción ósea y también para mejorar, por ejemplo, el mentón y la línea mandibular. El relleno dérmico debe ser bastante firme para que pueda crear una proyección duradera. Si se utilizara un relleno más suave, la piel estirada sobre el mentón o la nariz empujaría el relleno hacia un lado y se perderían la proyección y la definición.

– Restituir la grasa perdida y mejorar mejillas y labios. Otro excelente uso de los rellenos dérmicos consiste en restaurar o aumentar el volumen del rostro en zonas suaves y móviles, como los labios y las mejillas. En estas zonas el relleno dérmico debe ser más suave y más flexible. De esta forma, tu rostro se verá bien cuando hables y sonrías, pues la inyección de ácido hialurónico se convertirá en parte integral de tu piel y de tu rostro.

– Mejorar la salud, estructura e hidratación de la piel. Los skinboosters, otro tipo de relleno dérmico, son una opción adecuada para restaurar y mejorar la hidratación de la piel. Con los skinboosters se depositan cantidades microscópicas de gel de ácido hialurónico debajo de la superficie de la piel para brindar hidratación prolongada y aumentar su brillo.[3,4,5,6] Otra opción excelente son las inyecciones que estimulan la producción de colágeno, el cual disminuye de manera natural con la edad. Una mayor cantidad de colágeno hace que la piel sea más firme y más flexible.

Personaliza y perfecciona tu propia belleza

El uso de tratamientos estéticos se está incrementando año con año. Dado que los tratamientos inyectables no son permanentes, te dan la flexibilidad y capacidad que necesitas para ajustar y perfeccionar tus rasgos de manera natural y sencilla, algo que las cirugías no pueden ofrecerle. Además, podrás adaptar el tratamiento conforme a tu edad. Algunas zonas de la cara aún podrían necesitar cirugía; por ejemplo, la piel flácida alrededor de los ojos. No obstante, el Dr. Steven Weiner opina lo siguiente: “Creo que nos estamos acercando a una época en la que las cirugías serán mucho menos necesarias, incluso las de estiramiento facial, porque ahora podemos ir a la par de los avances tecnológicos”.

 

REFERENCIAS

1 Finn CJ et al. Dermatol Surg 2003;29(5):450–455.; Matsubara et al. Skin Res Technol 2012;18(1):29–35
2 Finn CJ et al. Dermatol Surg 2003;29(5):450–455
3 Gubanova EI et al. Cartel presentado en IMCAS 2015
4 Distante F et al. Dermatol Surg 2009;35(S1):389–93
5 Gubanova EI et al. J Drugs Dermatol 2015;14(3):288–98
6 Lee BM et al. Arch Plast Surg 2015;42(3):282–287.